Foteando a la siesta, mientras recorríamos un camino hacia no sabíamos bien donde íbamos a terminar, pero en alguna zona cerca del sur de Ceibas andábamos!
Lo seguro es que estábamos dentro de la Reserva Natural Ceibas, con un calor infernal.
Lo puede atestiguar este Cachilo Canela, que aunque lo parece no estaba vocalizando, sino que estaba sufriendo el calor.
Las aves, como todos los animales de sangre caliente, sudan, pero lo hacen de una manera diferente a los mamíferos, gracias a unas bolsas que llevan en su cuerpo, llamadas sacos aéreos, que les sirve para la evaporación del agua corporal cuando aumenta la temperatura.
Los días calientes el ave buscará zonas de sombra, su cuerpo mantendrá las plumas pegadas al cuerpo, separará las alas y respirará con el pico abierto, como agotado.
A mano alzada, recorte para acercar y revelado en Lr.
Agradezco a los que pasan a visitar y dejar su opinión y me gusta, feliz comienzo de año!